Telefonía en El Salvador: ¿a qué grupo perteneces?


El papel de los comunicadores en la actualidad puede aplicarse a múltiples ramas de la sociedad. Los nuevos comunicadores trabajaremos (y digo trabajaremos porque no hay que dejar a un lado la competitividad, jaja!) en áreas como la gestión de proyectos sociales o la creación y reconocimiento de las marcas.

Esta semana hablamos mucho sobre las marcas en clase. Quiero analizar, en específico, las marcas de telefonía celular en nuestro país. Ya saben: Tigo, Claro, Movistar, Digicel. ¿Qué podríamos decir de cada una de ellas?

Creo que podemos hablar mucho. Cada una de ellas ha construido comunidades simbólicas entre nosotros, pero a veces no lo notamos. Pongamos el ejemplo de Digicel. Hace tiempo, escuché en la U a un chero haciéndole burla a otro porque su celular pertenecía a Digicel. Entre los argumentos que le daba, estaba el de las tarifas y promociones. No recuerdo las palabras exactas, pero le dijo algo así como: "En Digicel casi te pagan para que estés con ellos".

¿De dónde le surgió esa idea? El slogan de digicel es "Primero eres tú". En ningún momento nos están diciendo que nos van a pagar o que tendremos acceso a muchas promociones. Todas las significaciones y construcciones simbólicas las hacemos nosotros mismos. Por experiencias personales o de nuestros amigos, por la misma publicidad, por lo que vemos, por lo que escuchamos, por lo que nos dicen. Ese es el trasfondo de la marca y difícilmente va a cambiar. Sabemos, por conocimientos simbólicos, que si compramos un celular Digicel, nos regalarán artículos (a veces dan sombrillas y hasta televisores jaja), participaremos en promociones o tendremos derecho a saldo gratis. Y eso es del conocimiento de todos. A partir de esos saberes, queda a nuestro criterio si compramos uno o no.

Mi punto es que las marcas nos promueven un estilo de vida. Estemos de acuerdo o no, se posicionan de determinada manera e inciden en nuestro pensamiento. A través de la publicidad y promociones de Digicel, sabemos que nuestras tarifas serán bajas, pero también que tendremos mala cobertura, por mencionar un ejemplo. La publicidad nos vende sentimientos, emociones y actitudes. Entre jóvenes, no es lo mismo tener un celular Digicel que uno Claro. El celular Claro te da otro status, perteneces a otro grupo. Perteneces al grupo que tiene buena cobertura, pero que tiene la capacidad de pagar tarifas altas (un grupo ficticio, pero visible para todos los que utilizamos celular). ¿O miento?

¿Qué pasa si tienes un celular Movistar? ¿Y uno Tigo? ¡Dejen sus comentarios!

Se venden películas piratas

Venía en el bus hacia mi casa y pensaba ¿sobre qué puedo escribir en mi blog? En ese momento, mientras el semáforo está en rojo, veo por la ventana y hay una camioneta del año, negra, preciosa. La conductora es rubia, delgada y elegante. En un abrir y cerrar de ojos, una mujer y dos niños se acercan corriendo a la ventana y le ofrecen a la señora películas piratas.

La mujer abre la ventana, toma dos o tres películas y paga. Cierra de nuevo y retoma su camino.

Interesantísimo. Generalmente, no me daría cuenta de que ese encuentro fue producto, en gran medida, de la Globalización que vivimos. Digo, no creo que hace 20 años se hubiera llevado a cabo de la misma manera ¿o sí?

¿No les parece curioso? Yo en un autobús con obreros cansados y estudiantes dormidos. Y, a unos cuantos metros, una señora en su camioneta de lujo, comprando películas no originales.

En una de las clases pasadas, discutíamos con Roxana el hecho de que el comercio informal (aquel que no goza de políticas e instituciones que velen por su bienestar y lo protejan de cualquier tipo de problema) supera en clientes y vendedores, por amplia diferencia, al formal. Esto genera una economía inestable, que tiene repercusiones en nuestra sociedad, como el aumento de las famosas “cachadas” y otras formas de crimen organizado.

Pero, volviendo al caso específico: he visto a la misma vendedora de películas piratas, en la misma esquina de la misma calle, durante varias semanas. ¿Por qué sigue ahí? Es obvio que, como diría una amiga, el negocio va bien. Y prueba de ello es que, en menos de cinco minutos, vendió las tres películas a la mujer de la camioneta. Supongamos que se venden tres películas cada hora. En ocho horas, a US $1 cada una, serían $24 por día. O sea, unos $720 al mes. Nada mal.

Pero el punto no es cuánto dinero se hace vendiendo películas piratas. El punto es lo paradójico que se está volviendo el mundo. Muchos vendedores del comercio formal no hacen esa cantidad de dinero al mes. Entonces, podemos decir que la desigualdad se va agudizando. Y que la Globalización es, en parte, responsable de ello.

Retiran comercial de Burger King en Costa Rica

La semana pasada, se retiró en Costa Rica un comercial de Burger King por fomentar la contratación de sicarios (asesinos por contrato). Cuando leí esta noticia me pareció interesante la relación que se puede establecer entre lo sucedido con los fundamentos teóricos de la Globalización.

Según la nota (que pueden leer en: http://www.elmundo.es/elmundo/2008/04/05/comunicacion/1207394820.html), la campaña de la empresa estadounidense se lanzó para celebrar el 50° aniversario de las hamburguesas de Burger King. Sin embargo, el anuncio parecía tener connotaciones indirectas que hicieron enojar a diversos grupos, como el Instituto Nacional de la Mujer. Dicha institución consideraba el comercial como ofensivo para la dignidad de la mujer.

Y es que el corto publicitario presenta a tres madres enojadas que contratan a un sicario para que asesine a un Rey, ya que éste posee una nueva hamburguesa que tiene vueltos locos a sus hijos. Busqué el video en internet; lo pueden ver aquí:




Para cualquiera, el comercial podría resultar cómico. Pero creo que el hecho de que haya sido censurado no se puede tomar a la ligera, sobre todo, porque podemos hacer una lectura a partir de la Globalización Cultural y Económica.

Sabemos que a partir de la Globalización Cultural que vivimos, los procesos de cultura y consumo son bastante parecidos en todos los países. En este sentido, valdría la pena recalcar que el comercial fue lanzado sólo en Latinoamérica. ¿Pero entonces por qué nada más fue censurado en Costa Rica? Creo que el gran problema radica en que cada país tiene sus propios valores, sus propias formas de vivir y ver el mundo. Y la Globalización Cultural no reconoce esa diversidad. Al contrario, lo que busca es unificar las formas de pensamiento y, además, preparar el terreno para que las grandes transnacionales ejerzan su papel dentro del mercado.

Ese, creo, fue el fracaso de Burger King. No se puede lanzar una campaña publicitaria igual en todos los países. Es obvio que no será vista de la misma manera en todos lados.

Lo paradójico es que esto, en lugar de suponer un fracaso dentro de las ventas de Burger King, fue utilizado para lanzar un segundo comercial, que pueden ver aquí:



Entonces, ¿frente a qué estamos? ¿Debemos ceder o resistirnos? Yo no lo sé. Pero creo que no está de más leer y relacionar el acontecer internacional con los temas vistos en clase.

¿Qué me exige la Globalización?


En la actualidad, el papel que los jóvenes jugamos dentro de la Globalización se ve condicionado por una serie de factores.

Estar globalizados trae consigo varios requisitos con los que debemos cumplir. El no poseerlos implica que no tenemos la capacidad de desempeñarnos adecuadamente dentro de una esfera globalizada.

Algunas de las características que, en teoría, deberíamos tener todos son:

1. Estar integrados a una buena red de contactos. Necesitamos tener determinada clase de amigos. Esta es una sociedad de conectes, de amistades que sean capaces de comunicarnos con otras y éstas con otras, y así sucesivamente hasta conseguir determinado objetivo.

2. Ser proactivos. Tenemos que tener la capacidad de tomar siempre la iniciativa. Demostrar que estamos listos y que deseamos desarrollar cualquier actividad, aunque en realidad no sea así.

3. Ser competitivos. La competitividad, como destreza, implica saber hacer cosas útiles, ofrecer servicios y dominar habilidades.

4. Tener inteligencia emocional. Debemos ser capaces de dominar la frustración y el estrés. Por ende, proyectaremos uno de los requisitos principales: la seguridad.

5. Poseer un pensamiento estratégico. Es decir, poder planear estrategias de trabajo ya sea individualmente o en grupo. Pensar siempre en cómo trabajar de la mejor manera para conseguir logros personales y de equipo.